En octubre, todos los miércoles, a las 21 horas, se presentará un ciclo de pelÃculas sobre la naturaleza y justificación del castigo. ¿Castigar sirve o es simplemente un imperativo ético?
Durante este mes, organizado por la Cátedra Derecho Penal del Departamento de Ciencias JurÃdicas PolÃticas y Sociales de la Facultad de Ciencias Humanas, proponemos una serie de pelÃculas que se preguntan sobre ¿por qué o para qué castigamos? ¿Tiene sentido el castigo? ¿Hacer sufrir a quienes a su vez han hecho sufrir a otros es algo correcto, simplemente necesario o ambas? En definitiva ¿Cómo es que –como sociedad- admitimos como legal la imposición intencional de dolor a otra persona?
Los intentos por superar estas contradicciones se traducen en las distintas explicaciones que pretenden dar para justificar la imposición intencional del dolor, a través de la pena.
Y será entonces que hay algo intrÃnsecamente bueno en castigar; que la pena estatal debe imponerse a quien ha causado un mal para la sola realización del valor ideal de la justicia sin sopesar valores en juego ni otorgarle ninguna otra finalidad de evitación futura de delitos que como piensan los “retribucionistasâ€; o algunos más modernos que sirva para comunicar simbólicamente una dosis de solidaridad institucional que iguala al autor y a la vÃctima. O será, por el contrario, que sólo se justifica el castigo si con él se evitan males mayores a la sociedad, es decir si con el castigo se evitan delitos futuros, sea porque la pena individual sirve como intimidación general o como sÃmbolo de buen funcionamiento del sistema; o porque reformará al delincuente o simplemente porque lo neutralizará, como lo ven las distintas posiciones “preventivistasâ€. O será tal vez como dice Hannah Arendt en la “La condición humana†que es imposible, más aún, inmoral castigar el mal radical. Los hombres son incapaces de perdonar lo que no pueden castigar, e incapaces de castigar lo que se ha vuelto imperdonable.
Centro Cultural Leonardo Favio (GalerÃa del cine, Buenos Aires 55). Entrada libre y gratuita. Organiza: SecretarÃa de Extensión de la Facultad de Ciencias Humanas (Departamento de Comunicación) y el Centro Cultural Leonardo Favio.
Miércoles 07/10. 21 hs: SALA 2. El ahorcamiento, de Nagisa Oshima (Japón/1968), 117 min.
El ahorcamiento nos introduce en la crueldad de la pena de muerte y nos obliga a pensar en las barbaridades que aún se cometen en nombre de la justicia.
El procesado R, coreano radicado en Japón, es condenado a muerte y ejecutado en la horca por asesinar y violar a dos adolescentes japonesas, pero no muere, sólo pierde la memoria. El comité organizador decide que, para que la ejecución sea eficaz, primero hay que conseguir que R recuerde quién es y lo que ha hecho.
Miércoles 14/10. 21 hs: SALA 2. No matarás, de Krzysztof Kieslowski (Polonia/1998), 85 min.
No Matarás es la versión fÃlmica ampliada del quinto episodio de El decálogo, que el director polaco Krzysztof KieÅ›lowski realizó para la televisión y que estaba compuesto de diez episodios.
Varsovia. Un taxista lava su coche. Jacek, un joven campesino de mirada turbia, vaga por la ciudad. Piotr, un estudiante de derecho, se prepara para hacer su último examen. Sus destinos se cruzan cuando Jacek coge un taxi para ir a los suburbios de la ciudad, donde asesina brutalmente al taxista golpeándolo con una piedra.
No matarás es un drama psicológico que deambula entre el asesinato personal y la pena de muerte institucional. Plantea un tema que suscita las posiciones más encontradas, que pueden ir desde la etiologÃa de un asesinato realizado por un sujeto impasible ante el dolor o la desgracia aunque aparentemente autocontenido y, por otra parte, la legitimidad auténtica con la que cuenta o no el aparato de Estado para respaldar la ejecución de una pena capital.
Miércoles 21/10. 21 hs: SALA 2. Timbuktu, de Abderrahmane Sissako (Mauritania/2014), 97 min.
Año 2012, la ciudad maliense de Tombuctú ha caÃdo en manos de extremistas religiosos. Kidane vive tranquilamente en las dunas con su esposa Satima, su hija Toya e Issam, un niño pastor de 12 años. Pero en la ciudad los habitantes padecen el régimen de terror impuesto por los yihadistas: prohibido escuchar música, reÃr, fumar e incluso jugar al fútbol. Las mujeres se han convertido en sombras que intentan resistir con dignidad. Cada dÃa, unos tribunales islamistas improvisados lanzan sentencias tan absurdas como trágicas. El caos que reina en Tombuctú no parece afectar a Kidane hasta el dÃa en que accidentalmente mata a Amadou, un pescador que ha acabado con la vida de su vaca favorita. Ahora debe enfrentarse a las leyes impuestas por los ocupantes extranjeros.
Miércoles 28/10. 21 hs: SALA 2.El Puerto, de Aki Kaurismäki (Finlandia/2011), 93 min.
El Puerto narra la historia de Marcel Marx (André Wilms), un ex escritor devenido lustrabotas (y cliente preferido de los bares) que ve cómo su esposa Arletty (Kati Outinen) se muere de cáncer. Mientras tanto, conoce y da refugio a un niño (un inmigrante ilegal de Gabón que intenta llegar a Londres para reencontrarse con su madre), ante la intensa búsqueda de la policÃa de esa ciudad portuaria. El director de El hombre sin pasado y Luces al atardecer reivindica a la clase trabajadora y critica con su mirada lúcida, lÃrica y humorÃstica la represiva polÃtica inmigratoria en Europa.